Natalia Liñan es una chica catalana que creció rodeada de peines y clientas...

De pequeña pasaba las horas en el salón donde trabaja su hermana mayor. Desde entonces, nunca dudó hacia dónde dirigirá su futuro. Con 17 años, después de acabar sus estudios como peluquera, se mudó a Barcelona para trabajar en un refinado y concurrido salón. Dos años después, junto con su hermana, abrieron su primer salón, el cual sigue en funcionamiento. Al mismo tiempo, formó parte del equipo técnico de Schwarzkopf Professional, donde pudo enriquecer sus conocimientos en el campo de la coloración. Por su espíritu aventurero, en 2019, se mudó a Melbourne (Australia), una ciudad con más de 5 millones de personas de todo el mundo donde tuvo la oportunidad de trabajar con clientes de todo tipo de etnias, estilos, culturas, y costumbres.

Su fuerte son los cambios de estilo, las correcciones de color, los recogidos, y los peinados de novia.

” Ahora, instalada en Andorra, mi país vecino que siempre he frecuentado y donde siempre me he sentido como en casa, espero poder continuar haciendo un poquito más feliz a todo aquel que quiera mejorar su imagen y formar parte de la tribu Ikigai. Ikigai define una filosofía japonesa que significa ‘encontrar el sentido a la vida’ en las cosas que haces, brindándote felicidad y motivación en tu vida diaria. Esto define perfectamente porqué nace este proyecto, ya que la peluquería es mi vocación y el motor de mi vida.”